De pronto vuelvo como en un sueño a aquel viernes cuando te conocí y me quedo con las ganas de conquistar un saludo, robarte un abrazo para luego sellar nuestro encuentro furtivo con un beso q no me haga olvidarte jamás.
Pero sigo con el afán de encontrar más motivos para este sueño tan flemático que pone en suspenso este corazón lleno de ilusiones.
Tengo espejismos de ti en mis tardes naftalinas cuando voy perdiéndome por el andén que siempre me hunde en mas ilusiones.
No te conozco lo suficiente, pero tus ojos reflejan tranquilidad y tus palabras detienen mi mundo para que finalmente con tus brazos cuides mi inocencia.
Pienso que este corazón es paciente pero me encuentro brillante y asustada por los motivos ridículos que no logro encontrar para que mi latido se acelere al pensar en ti.
Sabes que no importa si mis tácticas de conquistarte son inconstantes, si mis teorías del amor te intrigan, si mis frases tiernas te parezcan impertinentes, si mis ideas a tu lado sean solo un sueño.
Es que solo debe preocuparte que mi corazón insiste sagazmente y ante tu indiferencia termino expulsando sarcasmos sin motivo alguno.
Es interestelar este sentimiento que se esconde entre las tinieblas del orgullo. Entre las palabras de amor se quedo el calor de luchar por aquello que te hace brillar los ojos, como la luna misma sola tan cerca pero al mismo tiempo tan lejos de un simple rose que es capaz de capturar tus más íntimos sentimientos.
Aun sigo con las ganas de quererte y no tenerte esas mismas ganas que me hacen soñar por fin abrazándote.
Me pregunto porque nos sentamos a hablar de amor si tu corazón ya fue robado y el mío no admite tregua alguna para conservar la confianza en los finales felices.
Pero ahora prefiero esquivar tus miradas, alejarme de tu voz, escapar de tus abrazos y que tus palabras no lleguen más a mi corazón, para no permitir que descubras este corazón vulnerable porque nos encontraremos en un juego perfecto con un jaque mate camuflado.
Explotara el corazón sin latido alguno, te besare con agonía sin sabor en los labios, te abrazare por última vez sin encontrarte, lloraré tu indiferencia sin lagrimas en los ojos, entenderé la realidad sin sentido alguno, hasta que por fin desapareceré retrocediendo cada paso marcado cuando ya no pueda soportar la realidad en suspenso.
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